Las mejores portadas en sellos

La Empresa Nacional de Correos británica, la Royal Mail, lanzó a principios de este año una serie de sellos para celebrar unas portadas de discos que marcaron una época.

Hay que tener en cuenta que el objetivo de esta emisión no es homenajear la música sino el diseño gráfico de las portadas en si.

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Las portadas en si son lo suficientemente conocidas, pero los detalles son los siguientes:

1. The Division Bell, de Pink Floyd – diseño de Storm Thorgerson sobre esculturas de John Robertson.
2. A Rush of Blood to the Head, de Coldplay, diseño de Sølve Sundsbø
3. Parklife, de Blur – diseño de Chris Thomson y Stylorouge.
4. Power, Corruption and Lies de New Order, diseño de Peter Saville basado en A Basket of Roses de Henri Fantin-Latour, 1890.
5. Let It Bleed de los Rolling Stones, diseño de portada de Robert Brownjohn, basada en una foto de Don McAllester.
6. London Calling de los Clash – Fotografía de Pennie Smith con el bajista Paul Simonon destrozando su bajo en el escenario.
7. Tubular Bells de Mike Oldfield. Diseño de Trevor Key.
8. Led Zeppelin IV de Led Zeppelin. Un diseño de Jimmy Page que pidió total anonimato, por lo que no ya él sino ni el nombre de la banda aparece en la portada. «Un suicidio comercial» lo llamó un ejecutivo de Atlantic…
9. Screamadelica de Primal Scream – diseño de Paul Cannell inspirado por Picasso.
10. The Rise and Fall of Ziggy Stardust and the Spiders from Mars de David Bowie. Diseño de Main Artery sobre una fotografía de Brian Ward mostrando a un Bowie totalmente caracterizado en Heddon Street, en el centro de Londres.

Como en cualquier lista hubo críticas sobre el criterio de selección pero pesaron y mucho las políticas internas de la Royal Mail. Por ejemplo, no hay ningún disco de los Beatles simplemente porque en su momento ya tuvieron una emisión dedicada a ellos. También se consideró, por ejemplo, The Dark Side of the Moon, pero fue desechada por una simple cuestión técnica: Es demasiado oscura y no destacaría el matasellos.

Como curiosidad, veréis que la efigie de la reina Isabel II en unos sellos aparece mirando a la izquierda y en otras a la derecha. La ley británica no obliga realmente a una elección u otra, pero sí que deja claro que siempre tiene que estar mirando hacia el interior del sello. Por tanto fue una decisión del diseñador cual elegir.